Cúllar
Enclavada en una frondosa vega donde crecen numerosos árboles frutales, a 22 kilómetros de Baza y 125 de la capital granadina, encontramos Cúllar.
En su núcleo urbano destacan diversos monumentos arquitectónicos, como la Casa Consistorial, del siglo XVII, la Iglesia de Santa María de la Anunciación, del siglo XVI, de estilo renacentista con campanario de tres cuerpos, y el palacio de los marqueses de Cadimo, del siglo XVII.
Historia
Lugar de fértiles tierras, ha sido ocupado por el hombre desde los remotos tiempos prehistóricos. Fue una próspera villa en el período-árabe andalusí, y, según las crónicas, Almanzor acampó en su recinto en el año 985.
Como casi todos los lugares, pueblos y villas de la comarca, históricamente perteneció tanto al reino de Murcia como al de Granada; unida al bastión de Baza en el período nazarí, fue conquistada por los Reyes Católicos en 1484, y arrasada por el Zagal en 1488.
En 1586 también tuvo Cúllar un papel destacado en la sublevación de sus moriscos que, como tantos otros del reino de Granada sufrieron, desde la cristianización de territorio, cada vez con mayor dureza, las imposiciones de los conquistadores hasta que terminaron levantándose contra el régimen sin concesiones que dictara Felipe II. Sofocada la rebelión por D. Juan de Austria, los moriscos fueron desterrados y, en 1607, definitivamente expulsados de España.
Por privilegio de los Reyes Católicos Cúllar pasó a ser dominio de Baza, hasta que en 1620 pasó a tener la titularidad de villa independiente.
Cerca del casco urbano hay un viejo torreón de la época musulmana, que sirve de capilla a la Virgen de Nuestra Señora de la Cabeza.