Santuario de la Virgen de la Villa

El Santuario de la Virgen de la Villa está situado en un cerro que le proporciona una posición privilegiada y cuenta con el caserío del Baluarte en sus pies. Junto con la Peña es uno de los hitos más importantes de Martos. El templo se edificó después de la conquista de Fernando III y seguía el modelo de la Orden de Calatrava. El templo fue reedificado por Francisco del Castillo y, posteriormente, será restaurado con la ayuda de María Dolores Escobedo. 

El templo queda destruido tras un incendio provocado durante la Guerra Civil, quedando únicamente en buen estado su Torre Campanario. Se reconstruye un nuevo templo de estilo neobarroco, encargado por la Dirección General de Regiones Devastadas a Ramón Pajares Pardo. El actual templo presenta una planta en cruz latina con bóveda de cañón con tres arcos fajones y seis capillas alrededor, tres a cada lado de la nave, con rejas forjadas. A los pies del templo se encuentra en alto el coro, flanqueado por dos cuadros, uno barroco, que representa el martirio de San Andrés y el otro, que representa la Adoración de los Magos de Oriente. De sus capillas, destacamos la Capilla de la Virgen del Carmen, con retablo dorado con columnas salomónicas. El Altar Mayor, sobre cinco gradas muestra dos ángeles que sostienen unas lámparas y custodian el acceso a la Capilla Mayor, la cual posee un gran retablo con tres cuerpos de Palma Burgos. 

El Santuario de la Virgen de la Villa es conocido por su Virgen titular, cuya imagen era de origen gótica, del siglo XIII o principios del siglo XIV. Los restos de su cara fueron calcinados en 1936, y actualmente, se encuentran guardados en el interior de la imagen actual como relicario. La fiesta de la Virgen de la Villa se celebra el martes de Pascua, dos días después del Domingo de Resurrección.